El acto trasmisor de la vida humana es breve pero cada hijo es  un fruto permanente que esta llamado por la propia naturaleza a mantener con sus progenitores una vinculación indisoluble.

Esa es la ley vital de la familia los niños crecerán, dejarán de ser  niños, pero seguirán siendo niños del mismo modo, los padres jamás dejaran de ser tales.

Uno de los derechos fundamentales de todo niño es  de tener una familia crecer en ella y seguir perteneciendo a ella.  Cada niño posee el derecho natural de tener una madre y un padre que le permitan una existencia acorde a la dignidad humana. 

Quienes se separan o divorcian son los adultos que formaban pareja pero” los Hijos NO se divorcian”. Tal como sabemos desgraciadamente son ellos que sufren los peores efectos de las disputas entre sus padres (depresión, ansiedad angustia, adicciones y pueden llegar al extremo de auto eliminarse como ha sucedido).

El sano y pleno desarrollo de los menores requiere la  cercanía de las figuras materna y paterna, resulta evidente que tanto la falta de uno de ellos motivará sufrimiento, dejara secuelas y generará situaciones difíciles de superar

Apartar al padre o a la madre es nocivo para los hijos, injusto para ellos y para el progenitor que sufre el  alejamiento.

Es de innegable importancia que en caso de separación o divorcio, se evite todo el daño que sea posible en la personalidad de los hijos y se mantenga vigente la comunicación de ellos con ambos padres (aunque la pareja no conviva). Para que vivan integrados a la familia y relacionados también con los parientes de las familias paterna y materna.

Desgraciadamente es frecuente que en medio de graves conflictos de pareja los progenitores tiendan  a ver al hijo como un instrumento dócil y útil para ser usado contra el otro adulto en el contexto de ese conflicto. Al mismo tiempo, suelen considerar que lograr  la alianza incondicional del hijo y conseguir su tenencia exclusiva es el mayor trofeo a obtener en esa guerra que están librando por rencor, despecho, afán de venganza e interés económico .Es tomar al hijo de rehén convirtiéndole en su cómplice para lanzarlo como arma arrojadiza contra el otro padre.

Estamos motivados  por el propósito de informar, alertar, prevenir evitar y corregir todas aquellas situaciones conflictivas entre adultos que, traen consigo graves daños a los niños por el injusto alejamiento de unos de sus padres.

En nuestro país hay un problema cultural, una concepción machista dónde el hombre tiene que aportar el dinero y la madre decide todo sobre la vida del niño, hay una discriminación importante en los juzgados de familia, esto va en contra del concepto de familia y de igualdad.

Rechazamos a que se nos considere a ser “meros “ visitadores esporádicos y simples cajeros automáticos destinados  además a ignorar todo lo que se refiere a la vida de nuestros hijos (Salud, Escolaridad, etc.)

Para obstaculizar impedir o destruir la relación entre el hijo y su padre suelen utilizarse diversas estrategias ,se recurre en ocasiones  a pretextos pueriles y torpes ,pero muchas veces se llega a fabricar falsas denuncias de violencia o de abuso que, con su  sola presentación judicial ,provocan una interrupción de la comunicación paterno-filial .Dada la lentitud y torpeza que caracteriza al sistema judicial ,esa interrupción (que se creyó provisoria) termina eternizándose y destruyendo la relación entre el hijo y su padre aunque resultando de las actuaciones judiciales la certeza de que nunca existió mérito, razón o motivo real y verdadero para impedir la relación padre hijo como pretendieron hacer creer quienes presentaron la falsa y canallesca acusación .